El día está hecho para ti, ¿por qué no lo disfrutas?
Comienza el día mirando al Cielo
y pidiéndole a Dios por el día hermoso que tú quieres tener.
Disfruta de respirar y siente que estás vivo
y en ese vivir esperas lo mejor para ti.
No importa si es un día lluvioso, soleado o nublado,
importa que Dios puso ese día para ti.
Tú eres un Creador, entonces crea lo mejor.
Empieza disfrutando el día, la mañana, la tarde y la noche.
Al disfrutarlo sentirás que siempre eres libre para elegir.
Elige Amor sobre todas las cosas y siempre da Amor.
Lo que das vuelve multiplicado para ti.
Jesús.